La ambiciosa ruta que hoy hemos finalizado con éxito bordea Los Montes de la Peña, sierra que separa los Valles de Losa, al sur, y Mena, al norte, cada uno con sus peculiaridades, precisamente por esta situación respecto a la sierra y por su diferencia de altitud. Como han denominado al GR 85, que seguimos en unos treinta km. todo un espectáculo para los sentidos.
Tomamos la salida en el pueblo de Castrobarto, al oeste del patatero Valle, seguiremos toda la vega hasta el pueblo de Quincoces de Yuso paralelos a los Montes de la Peña y después siguiendo el curso del río Jerea subiremos hasta Relloso.
La derruida torre de castrobarto domina la rica vega, en estas fechas agradable de ver por el verdor de sus trigos y cebadas. La zona de monte está poblada de encinas, enebros, boj, etc. y abundante fauna como podemos apreciar en tres asustadizas corzas que nos tropezamos.
No nos es difícil adivinar el origen del topónimo Losa, viendo la construción de casas y paredes de fincas de los numerosos pueblos que atravesamos. También nos informamos sobre el cultivo de la patata en la comarca, importantísimo producto, sobre todo para la siembra, el que produce el Valle.
Las aguas del Jerea riegan buena parte del Valle de Losa, teniendo su nacimiento unos kms. al norte de este puente romano de Quincoces de Yuso.
Por carretera llegamos al semiabandonado pueblo de Relloso, pero hemos de continuar si queremos cruzar los montes por la ventana que asoma en la foto superior. La subida será exigente entre pinos y encinas.
Pero nada de cruzar Los Montes, como de costumbre por el collado, esta vez, literalmente los atravesamos por este pequeño túnel llamado de La Complacera y construído a finales del siglo XIX para bajar el carbón en carretas hasta la vía de La Robla en el vecino Valle de Mena.
La salida del túnel es como una ventana al mundo exterior, y ese mundo no es otro que el verde Valle de Mena, el hayedo que tenemos a nuestros pies y al fondo, los recién nevados Montes de Ordunte, ya lo dice el refrán "entre San José y La Señorita (25 marzo) una nevadita".
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Del paisaje típicamente agrícola, pasamos solo con atravesar La Peña, a otro básicamente ganadero tapizado con hermosos prados. Si desde Losa, La peña se ve como una elevada loma, desde Mena es un inmenso cortado donde abundan los buitres en el alto y los bosques de haya roble y castaño en la falda.
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| Además, el Valle de Mena guarda un auténtico tesoro en arte románico, solo basta echar un vistazo a la iglesia de San Lorenzo de Vallejo, ricamente adornada en sus puertas, canecillos y capiteles. Hasta Puerta del Perdón tiene esta iglesia, para aquellos peregrinos enfermos que no podían continuar por este secundario Camino de Santiago. |
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| Y qué decir de Santa María de Siones, para mi gusto más armónica en su conjunto y en un emplazamiento bellísimo. |
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| Ambas iglesias merecen una sosegada visita para admirar tanto su parte externa como su interior, y si contamos con guía mejor que mejor, que tanto simbolismo en sus piedras necesita de mucha imaginación y explicación. |
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| Nosotros hemos pedido "Dios y ayuda" para afrontar el siguiente tramo de ruta que nos ha de permitir el regreso, y que no es otro que El Puerto de la Magdalena, un empedrado camino por el hayedo que nos permitirá de nuevo cruzar al Valle de Losa. A esta dificultad en nuestro argot bicicletero lo llamamos emboscada, bueno pues aquí se han juntado todas las tribus indias, incluso el del banderín, dice Sito, para atacarnos. Casi quinientos metros de desnivel hemos de salvar llevando nosotros a las bicis, que no al revés. |
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| Pero una vez más hemos superado el reto, no nos quedaba más remedio, y así tomamos una última instantánea del Valle de Mena, de Los Montes y del Diente del Ahorcado al final de la Sierra. Con cincuenta km. hemos conseguido un precioso y exigente circuito y disfrutado de unos paisajes tan bonitos como variados, además de las ya mentadas iglesias. Unas cañas y una ración de morcilla en Villarcayo pondrán el colofón al día. http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=2637331 |
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