domingo, 30 de enero de 2022

EL RELOJ.

Alegoria del tiempo.
Unos piensan "que somos el tiempo que nos queda".
Otros, que "la vida solo cobra sentido cuando se mira hacia atrás, pero se tiene que vivir hacia delante".
Pasado, presente y futuro. Las tres formas más sencillas de entender el tiempo.
El presente, día a día, cada uno con su mochila.
El pasado se disfraza de nostalgia, también de vivencias.
El futuro es una mezcla de ilusión, incertidumbre y esperanza.
Hoy hemos aprovechado bien el día, nos hemos acercado hasta el reloj de la Peñuca.
Y degustado un menú casero tradicional que hace las delicias del paladar, y a la vez evoca el pasado. Patatas con morcilla, y chichas de matanza. Ni la magdalena de Prust lo supera.  Acaso la tarta del postre.
Todavía la tarde nos invita a recorrer La Vilga y su calzada. Como dice Sergio del Molino, "pasear, leer, escribir, son lo mismo, formas de desmadejar el pensamiento".











 

lunes, 24 de enero de 2022

QUITANDO EL FRIO.

Dicen que andando se quita el frío. Hay que salir!!!
De momento no queremos ese mundo virtual que ya llaman metaverso. Nos decantamos por lo real, por pisar el terreno que visitamos,  aunque haya pegado una helada de mil demonios.
Así que en vez de optar al teletransporte con las gafas de realidad virtual, nos ponemos las de sol y a pedalear por el helado camino del monte.
Y podremos ver buitres leonados de verdad, y no grifos de ciencia ficción.
Y  vacas tudancas, no centauros de pelicula.
Esto tampoco son proyectiles de algún arma extraterrestre, son muelas de molino.
No es un edificio futurista, no. Es una iglesia románica del S. XII.
Tampoco la talla de madera es nuestro avatar. Es un oso sujetando la tablilla que nos indica el año 824, primer fuero castellano, otorgado a la localidad de Brañosera.
Y entre estas y otras reflexiones se nos va haciendo la hora del bocadillo. Unos comen y otros beben, teta y sopa no caben en la boca.
Buen día de bici hemos pasado.






















domingo, 16 de enero de 2022

ESENCIA CÁNTABRA.

Saja, Tudanca, Carmona. Tres magníficos ejemplos, sin despreciar a otros pueblos de la región, de lo que ha sido lo rural en Cantabria. 
Por los tres tenemos el honor de pasar en la helada mañana de hoy.
Comenzamos por Saja, aun sombría, con la escarcha en sus tejados y las chimeneas a tope.
Ahora, como dice Chisco en Peñas Arriba ( José María  de Pereda) " Aquí se acabó lo yanu y andaderu".
Nos internamos en el hayedo de Saja. Roberto opina que es en invierno cuando el hayedo esta más bonito. La opinión no es gratuita, ha nacido rodeado de dichos árboles. Por algo lo dirá, pero no deja de sorprender, siempre se habla del otoño o de cuando sale la hoja en primavera.
Llegamos con esfuerzo a la Braña de Bucierca donde gozamos del sol y de buenas vistas.
Rápido descenso dejando a nuestra izquierda el Prao Concejo, y dando vista al bonito pueblo de Tudanca.
Casona de Tudanca donde habitó D. José M. de Cosío, y que serviría de reunión de ilustres escritores de las generaciones del 98 y 27.
Hemos subido el Río Saja y bajamos el Nansa. Así llegamos a Carmona, interesante conjunto de casas montañesas. 
"Se abre la puerta con lentitud y chillido de goznes y ve uno las abarcas, en ringlera, ante los escalones..."
Manuel Llano. Retablo infantil y otras estampas.
Fabuloso día de disfrute etnográfico y también en lo deportivo. Javier celebra la llegada a la Collada de Carmona.
Que el año nos depare muchas y bonitas rutas.


















miércoles, 12 de enero de 2022

DESPOBLADOS.

Tantos días pasan de Enero, tantas rutas pierde el viajero.
O quizás el refrán se refiere a los ajos. 
En cualquier caso, va siendo ya día de salir, que la pereza está siempre al acecho.
Los más madrugadores hacemos lumbre y vamos posando la puchera de patatas sobre la chapa.
Quitamos el rabillo a las reinetas, las ponemos una pizca de miel y al horno de la económica.
Dejamos las manzanas a medio asar, no se vayan a quemar, atizamos la lumbre, cerramos el tiro y nos echamos al monte.
Haremos la ruta de unas tres horas por los despoblados de Moroso y Candenosa, mientras la puchera de barro cumple con su cometido.
De Moroso quedan cuatro fantasmales paredes y esta nueva marquesina recordatorio de lo que fue.
Candenosa conserva dos o tres casas y un pilón vacío acompañado de un gran fresno.
 Pueblo más alto de Cantabria.
La cuadrilla está nerviosa, que cuánto falta, que cuándo llegamos....
Disfrutemos pausadamente del paisaje, que a todo dará tiempo. 
San Cristóbal del Monte.
Poca fé tenían en el puchero, pero la máquina  trabaja a buen ritmo. 
Un sofrito con la grasa de la matanza del día anterior y un pequeño golpe de calor. 
Patatas de Valderredible comidas en Valderredible y manzanas asadas. 
Al calor de la estufa y con siesta o paseo, a elegir.

Algunos elegimos paseo, no todos.