Una modesta elevación la de esta sierra del Caballar, pero no por ello desmerece una visita. Sus vistas a los Valles de Cayón y Toranzo son muy buenas, la ciudad de Santander también es visible desde lo alto. Los nevados Picos de Europa, Peña Sagra y los picos de Reinosa se encuentran a nuestro alcance desde aquí.
La subida es moderada dependiendo de la forma de cada uno, la pista es buena y la bajada sobre el alfombrado suelo de hojas de castaño se hace entretenida.
La niebla cubre el valle a orillas del río Pisueña, seguimos por su senda fluvial unos kilómetros.
No hay mejor GPS que la pregunta directa a los lugareños, en este caso robamos un poco de tiempo al paisano que con su dalle colodra con pizarra y carretillo se dispone a traer un poco de verde para alguna novilla. Amablemente nos indica el camino a seguir.
De esta forma nos presentamos ante la iglesia románica de Santa María de Cayón, llamándonos la atención la majestuosa encina que la acompaña.
Cruzaremos el Pisueña por el puente colgante.
Después de sudar la camiseta subiendo al alto del Caballar es hora de recrearse con sus buenas vistas. Vemos al fondo el Pico Porracolina.
Y hacia el suroeste el Valle de Toranzo surcado por el Pas, que desde lo alto en vez de un río parece una autopista.
Últimamente no hay ruta sin cantina. Un par de blancos de solera cayeron en esta de Agustín en Soto Iruz. Cien años abierta nos dice el veterano tabernero, de los comestibles se ocupa una también veterana tendera. Patatas, bacalao, porrones, frutas, conservas.. un poco de todo.
La vuelta a Castañeda la hacemos por la Vía Verde del antiguo tren Santander-Ontaneda conocido como la chocolatera.
 |
| Para celebrar el final de año, hoy vamos a mesa puesta en la segunda cantina de la jornada. Comida casera hecha con delicadeza, alubias blancas con chorizo y cabrito asado. Un placer encontrar sitos así. En Esles de Cayón se encuentra. http://www.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=11638039 |
No hay comentarios:
Publicar un comentario