¡Dejad fuera los cuidados
y acudid donde el juglar,
pues el juglar que bien canta,
remedio os será de mal,
medicina de las penas
y diversión sin igual!
Pasamos por robledales y sabinares. |
Llegamos al Cañón del Río Lobos, monumento natural vigilado por buitres y alimoches. |
La ermita de San Bartolomé, custodiada por el roquedo y los secos troncos de los olmos, le da un aspecto mágico al entorno. |
En la plaza de la catedral del Burgo de Osma tomamos la fresca cerveza ganada a base de pedal. Buen lugar para el descanso. |
El castillo de Gormaz domina la rica vega alrededor del Río Duero. |
Espectaculares trigales cambiando de color y salpicados de amapolas nos hacen el camino muy ameno, más adelante nos esperan páramos y loras. |
Parece que no haya pasado el tiempo desde que el Cid pasara por aquí. |
Castillos y atalayas, casas de adobe, iglesias, cruces, viejos caminos de transhumancia y gente mayor añorando otros tiempos, o quizás su juventud.
Los romanos dejaron su huella en forma de un enorme arco que perdura en el tiempo. |
Por otro desfiladero, el del Río Gallo llegamos al monasterio de la Hoz, la lluvia nos hace buscar refugio, por suerte, en el bar del monasterio, hidratarse toca. |
Si a últimos de junio hace fresco en Molina de Aragón debe de ser verdad que en invierno hace frío. http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=4709920 |
1 comentario:
Después de ver este atractivo reportaje creo que lo de que el Cid guerreaba y conquistaba era un bla bla que él se inventó para hacer turismo sin que nadie lo molestara y con la excusa de que estaba trabajando para el ingrato de su rey.Un listillo, el Cid. Y, sí, el frío de Molina de Aragón, en septiembre , por ejemplo, es polar, pero tienen un chorizo dulce frito que mejora los edredones nórdicos. Muy buena ruta, chicos.
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