No conviene que nuestras bicis pasen demasiado tiempo en los trasteros, por estas latitudes son espacios húmedos y sufren. Quiero decir que todos tenemos necesidad de tomar el aire. Por cierto que hoy no nos falta.
Elegimos una zona de transición entre la costa y la montaña, salimos de la localidad de Entrambasaguas. La zona tiene varias cosas de interés, arquitectura, paisajes, elementos geológicos reseñables, y una importante actividad ganadera.
El ayuntamiento de Hoz de Anero capitanea la merindad, a su lado estaba la antiquísima encina donde se celebraban las juntas, hoy sustituida por otra más joven. Creo recordar que hemos pasado por Quecedo en la Meridad de Valdivielso, Burgos, donde también existía la misma tradición debajo de otra encina.
En este estratégico e importante cruce de caminos no puede faltar una ermita.
Y seguimos viendo enormes portaladas e insignes blasones.
Esbelto el campanario de Hazas de cesto.
Una pequeña pero bien formada dolina llama nuestra atención bajando del Puerto de Fuentelasvaras y llegando al pueblo de Riaño.
Tenemos que celebrar el cumpleaños de Sito y no se nos ocurre mejor lugar que esta maravilla de cantina que encontramos en Entrambasaguas. Casa Marañón, fundada allá por los años cuarenta, pone a la venta cualquier artículo de alimentación, telas, ferretería, y un largo etc. imposible de resumir. Destacamos su fabuloso blanco de solera y la pandereta de arenques, que tantos recuerdos traen.
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