Como dicen que hay que empezar el año con buen pie, Roberto y yo decidimos poner los dos en movimiento y darnos un fabuloso paseo cerca de casa; hacía bastante frío pero andando se quita, primera parada: la ermita rupestre conocida como "cueva de la tía Isidora", situada a los pies del Pico Nava y junto al nacimiento del río del mismo nombre, paraje de belleza singular sólamente mermado por las captaciones de agua para varios pueblos y por los añadidos de dudoso gusto que han incorporado a la cueva.
Un poco más adelante se encuentra una de las muchas simas que existen en este complejo calar, pero ésta tiene un nombre muy especial, "cueva de la reina mora" digo yo que el pastor que le puso ese nombre también tenía derecho a dar rienda suelta a su imaginación.
El caso es que la foto superior corresponde al manantial que llega hasta el pueblo de Montejo y que a su vera se encontraba el Monasterio Benedictino de San Pedro de Celada, se adivinan algunos restos de sus cimientos, debió de desaparecer con la desamortización o antes pues en el Catastro de Ensenada, de Arnedo, 1752, aparece La granja de Zelada, y su propietario Juan García que la tiene a renta del Monasterio de Rioseco, pero para nada se menciona dicho Monasterio; conservan en Montejo el busto de una talla del santo y un campanillo de dicho Monasterio.
Estamos acabando este interesante paseo y una vez más me acerco al molino de Montejo, le observamos por dentro y por fuera, pequeño, de una sola rueda, la presa con buenos sillares.
Mi bisabuelo Cipriano vino una vez a moler con la talega al hombro y buena nevada (debía de necesitar la harina con urgencia para alguna vaca recién parida) el caso es que le rondaba el lobo, pero como no dio muestras de fatiga o agotamiento el lobo siguió su camino. (Transmisión oral)
La piedra de la foto de la derecha es de la puerta de entrada, de color del hierro y con una cruz grabada, puestos a especular puede ser del monasterio anteriormente mencionado. Seguimos confiando en algún colaborador desinteresado. Gracias.
Y esto fue todo, que no es poco, sería de justicia que los nuevos molinos se ocupen de este viejo molino.Si se amplía la foto se ven a lo lejos los eólicos que casi llegan hasta el mismo Pico Nava.
2 comentarios:
Sobre los arruqueros, en una novelilla publicada en Córdoba en1859 aparece la palabra con el significado de arrieros, y en una nota al pie aclara que es uso de la provincia. Y en el País Vasco, en Somorrostro, se usaba para referirse a los barcos que transportaban mineral de hierro. Más todavía: en Sierra Morena son los encargados de amontonar el corcho cuando se extrae de los arcornoques, al menos hasta 1983. ¡Y todo esto gracias a Don o Doña Internet!
Bueno, ya tenemos que eran transportistas, y en algunos casos de mineral de hierro, luego, una vez más la toponimia está en lo cierto y además nos informa de que en efecto seguro que allí había minas de hierro.Mi padre llama al camino "de los herruqueros" pero los mapas antiguos lo denominan "arruqueros" de ahí mi curiosidad.La etimología para otra vez, nos conformamos con internet.
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