"Buenos amigos y buenos abriles, uno de miles." Ambas circustancias se dan en el día de hoy, en el que aprovechamos para rodar por la comarca de Aguilar de Campoo. Pueblos con el denominador común de un bonito paisaje, y como valor añadido, los pequeños templos románicos de casi la totalidad de ellos.
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Salimos de Aguilar de Campoo en dirección norte, si al principio pasamos por sembrados de cereal, enseguida nos vamos internado en terreno de mayor altitud donde predominan prados y bosques, la primavera aún se hace de rogar por estas latitudes.
Así llegamos a la primera parada del día, junto a una sencilla iglesia románica en el pueblo de Matalbaniega. El interés se centra en el conjunto que forman el edificio, el prado sobre el que se levanta, y el paisaje circundante. En la lejanía, La Montaña Palentina nevada, y sobre todo ello, un precioso cielo azul que nos brinda el viento sur.
Seguimos dirección Norte pasando y parando en Cillamayor, después de cruzar la vía de La Robla. El primer avituallamiento lo hacemos junto a la iglesia de Matabuena, situada estratégicamente en el collado que divide el Valle de Santullán de la zona de la que venimos.
Nuestro siguiente objetivo es Revilla de Santullán, pasamos despacio por su alargado caserío, llenamos los bidones en la antigua fuente con pilón adosado y nos acercamos a su importante y bien conservada iglesia. Una visita en profundidad requiere venir en exclusiva con dicho plan. A nosotros nos motiva más una visión más global y nos apena encontrarnos, una vez más, los portales de las iglesias cerrados a cal y canto.
Rumbo a Villabellaco coincidimos en parte con la senda del escultor Ursi.( Adjunto un enlace http://www.piedraabierta.com/adftp/ursi.pdf ) Sendero de pequeño recorrido balizado y salpicado de esculturas de dicho artista. La agradable mañana invita a varios paseantes a recorrer dicha ruta, con la ventaja de que aquí, en el campo, las puertas están de momento abiertas.
De nuevo un recio edificio religioso del mismo estilo sale a nuestro encuentro en Villanueva de la Torre. La iglesia también merece una sosegada visita. Nosotros seguimos camino.
Las cigüeñas se encuentran en plena función reproductora, la abundancia de lluvias caídas se traduce en prados inundados y charcas y lagunas a rebosar. No les faltan, por tanto, ranas y culebras con que alimentarse.
De nuevo cruzamos la vía de La Robla para llegar a Salinas de Pisuerga, tomar una cerveza y comer junto al Pisuerga, que baja bravo.
Regresamos a la Villa de Aguilar, que por sí sola merece un día de visita, por los pueblos de Zalima. Aún echamos una lejana ojeada a la iglesia de Matamorisca y al momento nos encontramos ante Santa María la Real y el castillo. Recorremos la calle peatonal, que nos deja en la plaza, y damos por finalizada esta interesante excursión.
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=4326006 |
1 comentario:
Si la envidia fuera sana, lo que producen vuestras andanzas sería envidia sana, pero me temo que la cosa se queda en cochina envidia, al menos por mi parte. ¿Por dónde la siguiente ruta? Si necesitáis apoyo moral, aquí os van varias toneladas.Magníficas las fotos.
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