LA ALDEA Y SUS CABAÑAS.

Jornada en bici por las tierras altas de Cantabria donde la primavera se abre paso con pequeños gestos. Narcisos, lirones y la alegría de los pájaros son las primeras muestras.

Dice el ciclista que este tipo de salidas debieran estar prescritas por los médicos.

Lo cierto es que el sol nos da la vida, salimos del invierno con ansia de luz.

Y el día no puede estar mejor.

Nos acercamos al Santuario de Montesclaros. 

Puertas abiertas orientadas al sur.

Iglesia de Bustasur y pequeño cementerio. En los pueblos siempre tienes un hueco donde "caerte muerto".

El paso por La Aldea de Ebro es obligatorio.

Toca almorzar en la fragua de Mediadoro ante la atenta mirada de perro y gato.

Con el estómago lleno iniciamos una partida de rana.

Las iglesias siempre suponen el principal atractivo de los pueblos, bien sea por su estilo, ubicación, o por algún árbol singular que la acompañe. 

San Miguel de Arcera.

Despedimos la jornada con media batería de la bici gastada pero con la nuestra al cien por cien de carga.

RUTA EN WIKILOC:

https://es.wikiloc.com/rutas-bicicleta-electrica/los-riconchos-207292921