domingo, 7 de julio de 2024

SEGOVIA. TRES DÍAS DE PEDAL.

Tres días de pedaleo y compadreo por tierras segovianas que nos llevan a conocer tres comarcas definidas y diferentes de esta bonita provincia.
Saliendo de La Granja, a través de la pradera llegaremos a los pinares de Valsain.
Senderos y caminos que a veces nos hacen posar los pies. Nada que no podamos superar.
Un poco de deporte por el día y mucha gimnasia social al finalizar la jornada.
Aparcadas las monturas, la ciudad se merece un sosegado paseo antes de liarnos con el cochinillo.
Acueductos, catedrales, el alcázar, todo ello bien cuidado y bañado por una luz al atardecer que no merece el blanco  y negro.
Mejor?
Hasta al mismo Sito, poco dado a la valoración artística, le encantó la Segovia monumental.
El segundo día nos internamos por las Hoces del Duratón.
Tomando la salida en la plaza de Sepúlveda.
Con la correspondiente autorización de las autoridades del Parque, cruzamos el cañón.
Con algún que otro arañazo llegamos al final.
Ponemos rumbo al mejor mirador de dicho cañón que es la iglesia de San Frutos.
Roberto luciendo maillot de Aguayo por tierras segovianas.
La bota no se quedó en casa.
Otro blanco y negro. A Sepúlveda le queda bien, necesita mejorar...
Regresamos a Segovia que aún nos quedan cosas que ver.
El último día cambiamos de paisaje, recorremos parte de la Cañada Real Soriana Occidental.
Paisaje hermoso, con sus dehesas, arroyos y paredes que flanquean dicha cañada.
Los rebaños han sufrido una gran merma desde aquellos tiempos de la Mesta.
Lo mismo que los pueblos. Aquí se recrea el fotógrafo.
Otra más.
La jornada finaliza en Pedraza. 
Tres días para llenar nuestra mochila de buenos momentos y con la esperanza de repetir el próximo año.