jueves, 1 de febrero de 2018

RUTA HOYO SACRO

     Con un magnífico día nos disponemos a realizar esta Senda de Hoyo Sacro (PR-S-82) partiendo desde el aparcamiento de Brañavieja. Ha helado y la nieve está dura. Se anda bien y no ponemos las raquetas en todo el camino.
Las vistas del Valle de Campoo son magníficas.
Enseguida llegamos a la cabaña de Hoyo Sacro donde su constructor, Luis García Guinea, escribió la primera vez que llegó a este lugar:
"Una tarde de agosto, en uno de mis frecuentes vagabundeos por la montaña, subía lentamente con mi macuto pastoril a la espalda las empinadas cuestas de Piedra Hita, en el valle de Campoo de Suso. Había salido de una cabaña de pastores, donde pernocté, dejando atrás sucesivamente más cabañas, escobales, torrenteras y praderas, cuando, al coronar jadeante la cumbre de una ladera copiosamente salpicada de ráspanos, apareció ante mí una braña, rodeada de inmensas moles de rocas. Almorcé allí, junto a una friísima fuente que nace al pie de la roca, y me prometí que en sitio tan placentero construiría mi cabaña".
Pasamos largo rato admirando el lugar, su arroyo con sus meandros, y las rocas derrumbadas que parecen amenazar a la cabaña.

Y naturalmente tanta admiración nos abre el apetito, qué mejor sitio para hacer honor al avatar botero.
En la cabaña se lee un fragmento del libro "Hoyo Sacro":
"Y construí en Hoyo Sacro,
 virgiliano y plácido en los meses de verano,
como terrible e inhóspito en los restantes del año,
mi refugio, mi nido"
"Este vacío inmenso es la eternidad
que comienza a partir de las cumbres,
que hacen sentir el cuerpo insignificante
y el alma asombrosamente gigante"

Seguimos ruta hacia la siguiente cuenca que es Guzmerones con su correspondiente cabaña
Y bajando llegamos a la laguna del sapo.

LLegando a Cirezos ya podemos encontrar más vegetación entre la que destaca varias matas de abedules.
La ruta acaba en el mismo punto de partida.
...y empieza la posruta, que en este blog se la da la misma importancia, ni más ni menos.
Después de comer una zarzuela de cocido en el Pico Casares de La Lomba visitamos la cantina de Salces, una de las pocas que se conserva. Brindando por más días y buenos momentos como éste.

Para quien quiera saber un poco más sobre la cabaña de Hoyo Sacro:

1 comentario:

MAITE dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.